– Fundamentalmente vamos a trabajar para que recuperes la sensación de control sobre tu vida.
– Lo primero será decidir entre los dos qué tipo de terapia es la más adecuada para ti de forma personalizada.
– Habitualmente en los casos de TEPT, la terapia cognitiva focalizada en el trauma ha demostrado una gran eficacia.
– Comenzaremos con un buen diagnóstico y creando un vínculo fuerte paciente-terapeuta.
– Posteriormente procederemos a explicar la terapia, las fases que seguiremos para el tratamiento y abordaremos el problema de forma global. Trabajaremos también la motivación, indispensable para finalizar de modo positivo el tratamiento.
– También te enseñaremos técnicas de regulación emocional al mismo tiempo que nos exponemos a los recuerdos dolorosos del trauma. Esto ayuda a que te enfrentes de forma segura a recuerdos que te aterran para que puedas aprender a afrontarlos de manera eficaz. La terapia de exposición puede ser particularmente útil para traumas pasados y pesadillas.
– También trabajaremos mediante reestructuración cognitiva las cogniciones asociadas al trauma, te ayudaremos a reconocer los patrones cognitivos que hacen que te estanques, creencias negativas sobre ti mismo, miedo de que el trauma vuelva a suceder…
– Finalmente atenderemos a otros problemas asociados que hayan podido surgir a causa del trastorno (dificultades a la hora de las relaciones sexuales, falta de implicación en las relaciones, consumo de drogas…)
• También podemos ayudarte con tus habilidades de control del estrés.
• Valoraremos la posibilidad de realizar terapia en grupo y talleres, muy útil en estos casos.